España es un país que siempre ha necesitado de líderes, de patrones, de caudillos. El problema a la hora de buscar un gerifalte, es que tendemos a idealizar y en ese momento, al considerarlo diferente, al hacerlo tan grande, haces al resto pequeñitos y eso acarrea confusiones, tanto para el jefe como para los súbditos. No es conveniente idolatrarles, endiosarles y subirles a las alturas en exceso y por norma. No es bueno darles siempre la razón y decirles constantemente “sí, señor ”; esto les hace vivir en un micro espacio, carente de autocritica y muy alejados del suelo. Irrealidad total o parcial es la consecuencia. Yo lo llamo a esto, el complejo del “si bwana”.
La autocrítica es la mejor medicina contra esta enfermedad; es una práctica que considero sanísima, pero que, según me toca comprobar con desagradable frecuencia, cuenta con muy pocos adeptos. Cuando no eres capaz de hacerla, puedes caer en el error de comportarte como un dictador, alejando de tu lado a todo aquel que no piensa como tú o viendo continuos ataques personales, donde solo hay diferentes formas de ver las cosas.
Detrás de cualquier “invitación a irse” por esta causa, creo que se esconde o cobardía o soberbia. Nuestro ego elabora rápidamente una respuesta de ese tipo, que nace como fruto de esa mente reactiva y soberbia. Las invitaciones a irse, nunca han sido buenas soluciones, pero siempre me han aportado energía para vivir, para seguir luchando por defender mi idea, mis puntos de vista y por romper con estructuras construidas en tierras movedizas.
Hay muchas formas de vivir: dormidos, arrodillados, de pie, de flor en flor, en éxtasis místico… tú eliges como hacerlo; puedes vivir arrodillado y esclavo de los demás, aceptando sus voluntades y obedeciendo lo que imponen o vivir como una mariposa, de flor en flor, en continua acción y no parar a pensar nunca. O vivir en un éxtasis místico, dejando de ser consciente de la realidad. O…
Yo elegí, hace tiempo, vivir despierto a sensaciones, emociones y pensamientos. Vivir, pensando y actuando en libertad, independiente. Vivir sin esperar ser recompensado. Vivir para ser útil, no para ser importante.
Vivir, como veis, se puede vivir de muchas formas. ¿Cómo vives tú?
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