jueves, 12 de enero de 2012

HOMBRES Y MUJERES

Todas las generalizaciones son peligrosas, incluida ésta. Corres el riesgo de equivocarte fácilmente pero hoy quiero correr este riesgo.

Las mujeres se quejan de los hombres continuamente. Lo hacen en cuanto tienen la menor oportunidad, con amigos, compañeros de trabajo, con vecinos, con familiares; con fulano, mengano y zultano. Tal vez lleve razón aquel que decía que los hombres somos de Marte y las mujeres de Saturno. Posiblemente seamos seres muy distintos habitando un mismo planeta.

Arquetipos y estereotipos nos limitan muchísimo. Pero hoy, a petición de una mujer  voy a comentar algunas de las generalidades que veo en el “sexo contrario” y lo he puesto entre comillas para que no haya susceptibilidades, pues ya  sabemos que el alma femenina es más sensible que la del hombre y muchos de sus sentimientos están ausentes en el hombre, razón por la cual se sienten muy incomprendidas.

La espontaneidad y naturalidad no es su fuerte; cuando dicen NO,  en realidad, quieren decir sí. A veces dicen tal vez, que quiere decir NO. Muchas veces nos dejan decidir: “decide tú pero haz lo que hago yo”. Cuando hacemos lo que queremos tiene consecuencias. Y en ocasiones emplean el “necesitamos” como sinónimo de “yo quiero”. Creo que nos comunicamos de forma muy diferente, ellas te dicen tenemos que hablar cuando quieren quejarse de algo y nos critican de no comunicarnos lo suficiente para decirnos tienes que estar de acuerdo conmigo. Veis como somos de planetas diferentes.
El estado de ánimo de una mujer parece un formula 1, pueden pasar de 0 a 300 en 10 segundos. Nosotros somos más planos, más simples. No las entendemos.

Hoy me pedían hacer una relación de cosas buenas de los hombres y la verdad me resulta más fácil hacerla de las mujeres. Eso sí,  si pedimos opinión sobre nosotros, no nos importa no recibir halagos, no necesitamos subir nuestro ego de esa manera que lo reclamáis vosotras  y por supuesto no nos molesta que necesitéis constantemente quejaros de nosotros. Estamos acostumbrados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario